domingo, 14 de marzo de 2010

Capítulo 3.- Descifrando Jeroglíficos En El Aire

A pesar de los gritos y los regaños, que salían de ese cuello gordo y lleno de pliegues, acompañado del tintineo de docenas de pulseras , Ella pudo descifrar ese mundo, lentamente, en una progresión que vivió con deleite, sintiendo las destrezas de su inteligencia, desentrañó claves fundamentales de ese cosmos, hizo recopilación de esos referentes y los anexó a sus sabios cinco años, y claro también gracias a la ayuda de los lazarillos que encontró a su paso, como fue Gala y la viejita con el ojo de gato, de ese modo Ella pudo penetrar las palabras, y un día así exactamente como entra la aurora, lentamente, despacito pero contundentemente iluminando todo, así fue vislumbrando dentro de las palabras, los tonos, los cadencias, así fue que divisó los signos que conformaban los códigos, distinguió sus deberes, descifró los ritos y su papel en ellos. Los golpes, solamente la convencieron de que los que la rodeaban se desesperaban, Ella decidió que debía mostrar que entendía, antes de que golpearan su cuerpo, ella misma se presionaba, repitiendo dentro de su cabeza las palabras de su madre, “¿qué no entiendes? ¿qué eres tonta o qué?” ya traía agotada a su cabeza en el esfuerzo, aun que realmente fue logrando descifrar lo fundamental para mantenerse viva y a salvo de manotazos y de fustes, esta es su realidad ya no tiene tiempo para dolerse de sí misma, ni de su piel ante los castigos por la desesperación ajena, Ella audaz y decidida aguza todos sus sentidos para comprender las palabras nuevas que eran dichas tan rápido, ahí fue cuando se dio cuenta de que nadie explicaba las cosas como su abuela. Siendo Ella sorda al significado de las palabras, su audición era receptora de los tonos de los modos y esto la condujo a la escucha de las almas que por esas voces intentaban salir, así que cuando entendió las palabras ella ya sabía con quienes estaba tratando, durante ese tiempo muda y sorda a los significados, se forjo dentó de Ella una aguda y excelente escucha de los tonos, los modos, a los silencios, de los gestos y ademanes.

Llega el siguiente paciente,entra duvitativo, dice ,,,perdón ¿yo? gracias doctora, buenas tardes, ¿cómo está Usted?,,, y es precisamente por las dotes que desarrollo en aquel tiempo en que era muda y sorda al significado, que ahora Ella puede descifrar con relativa certeza cómo están sus pacientes casi desde el saludo, el tono, la mirada los ademanes y los silencios son un lenguaje claro que le habla desde lo más hondo de su interlocutor, el paciente con dificultades y con gran destreza se pasa de su silla de ruedas y se recuesta en el diván, respira un poco más agitado de lo habitual, trae un dolor viejo que se está haciendo presente …vengo muy afligido,,, silencio largo …me dijeron mis hermanos que soy un estúpido, porque le doy una pensión excelente a mi ex mujer y a mis dos hijos, ¡¿que cómo es que yo me la estoy pasando difícil?!,,, …¿Y tú que sientes?,,, …pues yo siento que le fallé a mi mujer, me enfermé, perdí el trabajo, perdí la movilidad de las piernas, del brazo y ahora, desde que desarrollé el problema de mis ojos, que como le he dicho, eso es lo que realmente me limita, lo de mis piernas no me importa, ¡ pero la vista es tan pobre que apenas puedo desenvolverme!, dediqué mucho tiempo a buscar un diagnóstico a buscar solución, los médicos me decían que no tenía nada, me pasé así dos años, hasta que la vista se deterioró terriblemente, le fallé a mi mujer,,, Aunque Ella se da cuenta de que él se siente responsable de su mujer como si fuera una niñita, como si él hubiera buscado o provocado su circunstancia física, concluye que primero debe apoyarlo en el proceso de duelo y le dice, …parece que aun no has terminado de despedirte de tu cuerpo sano, aun no has asumido que éste cuerpo es con lo que cuentas, estas en un nuevo comienzo, eres una nueva persona y la misma,,, él le dice explicando con cierta vehemencia … es que yo era un hombre alegre, trabajador y podía hacer todo, no dependía de nadie, daba mis clases y tocaba la guitarra en bares, en recitales, en donde fuera yo siempre podía hacer mi trabajo pero este maldito brazo y sin mis ojos, doctora es dificilísima la vida, además yo le fallé a ella, me enfermé, yo debía haber hecho algo, me debí haber dado cuenta antes del desastre de mi salud ,,, Ella le afirma …vives como si tu vida ya la hubieras vivido, como si no estuvieras aquí, además, piensas en tu exmujer como si fuera una niñita, inútil y no una adulta sana,,, el sigue hablando quejándose, pidiendo conmiseración …ella no me tiene piedad doctora, ella quiere más dinero y me amenaza con quitarme a los niños,,, Ella dice …claro, parece que ella sí te ve como si fueras un buen negocio, ella sí te ve fuerte,,, él dice dolido y amenazando …a veces quisiera no se qué hacer doctora, yo sé que no lo voy a hacer, pero de veras a veces estoy desesperado,,, Ella sabe que la depresión se acrecenta y se enquista con conmiseración así que con mucha ironía le dice …!hay pobrecito! Si lo que quieres es tenerte lástima pues tienes la mesa puesta, si lo que quieres es que Tu vida cambie, entonces la única salida es dejar de tenerste lástima, ya terminamos nos vemos la próxima semana,,, El paciente dice estremecido …sí doctora gracias,,,
***
Por la noche ya casi en la madrugada, la niña al llegar a su cama, se quita aretes, sedas, pulseras, adornos en los tobillos, en los cabellos, se baña y con particular cuidado lava su cara y los pies, algunas noches, aunque estaba muy cansada, podía pasar despierta unos minutos antes de quedarse dormida y se confortaba el espíritu pensando en su abuela, recodando su cariño, y toca el lunar que tiene en su barba, la abuela le dijo un día “cuando quieras que nos encontremos toca tu lunar y piensa en mí, y yo lo sabré” la abuela tenía el mismo lunar exactamente en el mismo lugar y Ella ponía su pequeño dedo índice en el lunar de su abuela y la abuela le tocaba el suyo con su dedo forrado de esa suave y delgada piel de anciana, se adormila recordando su cercanía, que la trataba como niña, que le enseñó a hornear galletas, a amarrarse los zapatos, a jugar ajedrez y además recuerda que es quién está cuidando el gatito de los ojos amarillos, Ella se siente triste y sabe que cuando se siente sola, cuando está desesperada, observando que su vida no es nada de lo que le habían dicho que sería, enredada en esa espiral de pena, la inunda la conmiseración, se tiene lástima, se duele de su circunstancia y esa tristeza la conforta, la acompaña, pero los empujones y los gritos no fueron una buena caja de resonancia para su depresión, se da cuenta de que la irritan y no le tienen lástima, entonces se le quita la tristeza y se pone a hacer lo que tiene que hacer, por eso a veces cuando quiere quitarse la tristeza, Ella lo hace sola y aun que triste, da el viraje, como si el mundo diera vuelta, solamente cambia su atención se centra en otro foco, piensa en algo que la saque de la tristeza como en que tiene sed, se pregunta por el agua, se sirve en un vaso y al beber la fresca transparencia enfría su garganta y todo se modifica, aunque no cambia nada, el cuerpo la salva, en otras ocasiones el cuerpo la somete, cuando está agotada por las danzas, las posiciones, los ademanes, las tareas que la agotan, cuando la humillan, entonces es el equilibrio opuesto. Logra hacer una distancia, que le permite vivir lo que vive sin vivirlo, Ella se afirma diciendo imaginando que lo que sucede, le sucede al cuerpo y no a Ella, esto lo aprendió desde luego con su abuela, estaban contentas en la cocina, enseñando y aprendiendo a ser mujeres a medir ingredientes, a imaginar sabores a contemplar procesos y juntas sienten que sus vidas tienen sentido, porque sus voces suenan y sus rizas se mezclan, la abuela trae su mandil de cuadros rojos y blancos, Ella trae uno pequeño pero idéntico, la abuela pela las patatas y pica las cebollas, Ella rompe los huevos, los echa en una cazuela, les agrega pimienta, sal y los mezcla, están haciendo una tortilla de patatas, pero cuando la mezcla ya está en la sartén de hierro caliente, la abuela intenta voltear la sartén sobre el plato, entonces una orilla del metal, roza el bracito de la preciosa niña, su piel se deshace al contacto del hierro caliente, es un incidente que sucede en un segundo, Ella llora fuerte, la abuela también se ha quemado, gritan juntas y dejan caer todo, la sartén, el plato, la tortilla, dan pasos hacia atrás, y la abuela le dice …!hay mi hijita¡ ¿te quemaste?,,, la niña llorando dice …si abue,,, la abuela le pregunta …¿quieres que te cure primero la piel o el dolor?,,, la niña dice …!el dolor abue,,, …bien, pon atención, escucha bien ¡la quemada no eres tú, sí esta quemada tu piel, pero el dolor está lejos, no es tan grande!,,, Ella no escucha está llorando a gritos, llamando a su mamá , la abuela la toma de los hombros y la voltea, le dice con una voz firme cerca de su cara …¡cállate!, ¡ve tu quemada mírala!, no te domina, sí estas quemada pero solo es un poco, el resto de tu cuerpo está bien, siente tu salud, ahora te voy a curar, la piel,,, entonces la abuela acerca la botella del aceite, Ella se asusta y violentamente retira su mano, la abuela le repite con firmeza …¡sí te duele pero es muy poco, controlarte!, dame tu mano piensa que la quemada está ahí, pero que no te domina, mira mi quemada,,, la abuela le muestra la horrible quemada en su piel de vieja y la niña se sorprende …mira estoy un poco quemada, como tú, pero no nos domina,,, mientras dice todo esto cariñosa pero severamente, abraza a su nieta, Ella aprende esto y es un tesoro que la acompañará toda su vida, y fue precisamente la casa de la puerta roja la que le ofreció las condiciones para engrandecer esta destreza.

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